Ya estamos en casa, aún emocionado con lo que pasó este sábado en Ironman Lanzarote Canarias Triathlon Spain y muy motivado por lo que puede venir. El sábado volví a disfrutar, el sábado volví a encontrarme conmigo mismo, haciendo mi carrera sin fijarme en nadie.
El despertador sonó a las 4:00, desayuné y me puse a preparar la batalla rápidamente. Esta vez era especial, acompañado por mi hijo y mi mujer que desde las cuatro estuvieron al pie del cañón. Después de preparar la zona de transición llegué de los primeros a la línea de salida, sobre las 6:15.
Estuve esperando el bocinazo de salida en primera línea. Salí con fuerza en una natación limpia, haciendo mi marca personal. Después de una transición decente me puse con un tramo de bici que sabía que iba a ser épico por el viento, pero con la esperanza que los últimos 70km fueran con viento favorable. Después de lo mucho que sufrí en IM Kona 2014 me había prometido disfrutar de mi carrera, así lo hice de principio a fin, intentando ser conservador en todo momento.
Poco a poco me fui metiendo en el segmento con la mirada fija en los watios, con paciencia veía que iba ganando posiciones. En el tramo de miradores me sentía fuerte, iba cogiendo algún profesional y eso me daba alas, hasta que al bajar Mirador del Rio me di cuenta que el viento a favor de la vuelta era poco, me dio un bajón que solo lo puede recuperar con mucho trabajo mental. Después de esos kilómetros de bajón fui cogiendo un ritmo fuerte que me llevaba a meta con ganas de correr.
T2 tranquila, intentando recuperarme del tremendo esfuerzo de la lucha contra el viento, los demonios negativos y el frío en alguno de los puertos. Tenía en la cabeza la mala experiencia de Kona 2014, pero sabía que había trabajado mucho mi mente para poder superarlo, me puse a correr sin un solo dolor de piernas, notando una sensación de ligereza que hacía tiempo que no tenía, utilizando mi anclaje de brazos sueltos. Empecé a buen ritmo, con expectativas de acercarme a las 3h en la maratón pero poco a poco las fuerzas iban hacia abajo. Me había controlado mucho al principio, sabía que podía ir más rápido, también sabía que en algún momento llegaría el hombre del mazo, pero no quería que esta vez me diese con tanta fuerza que me dejase sin correr.
Me había alimentado e hidratado muy bien en el tramo de bici pero en el run cometí el error de no tomar sales y beber menos de lo que debía, así que por el kilómetro 20 la deshidratación era demasiado acusada, no había vuelta atrás, pero esta vez supe luchar contra las ganas de ponerme caminar, había prometido disfrutar corriendo, no andando. No era el único que estaba cayendo, a lo largo del camino iban quedándose compañeros.
Fue un día largo y duro, muy duro, pero para eso estábamos allí. No para llorar. Sabemos a que nos enfrentamos y nos encanta, es el sufrimiento que has elegido, el sufrimiento que nos apasiona y nos engancha a este deporte.
Llegando a meta solo pensaba en ver a mi mujer y mi hijo, en abrazarles antes de entrar en meta, ellos dos son los que han hecho el trabajo más duro, yo solo disfruto. Les debía esta carrera. No hay palabras para describir la entrada a meta del sábado, ha sido la más sentida. Me sigo emocionando al recordarla. Este deporte me sigue dando grandes alegrías y me sigue demostrando que cada batalla es más épica, que cada batalla es más disfrutada, que cada batalla llena más mi vida.
Al final gran resultado, siendo 2º de mi grupo de edad, 7º de los atletas no profesionales y lo mejor de todo, una gran 22ª posición de la general. Como colofón, nueva clasificación a Kona. 3 de 3 consecutivas y a la primera.
Dar gracias a todos los colaboradores que me han ayudado a llegar hasta aquí: Argon18 España, Where is the limit?®, Isostar-Spain, Alimmenta, Evoluciona FES, Barcelona-Quiropractica,S.L..
A las personas que me siguen dando su apoyo en sus campos: Guillermo LLadó Garriga, Ivan Herruzo Fernandez, Eduardo Grimal y la gente de Where is the limit? Barcelona.
Y como no a toda mi familia y amigos… Esta vez me acompaño de cerca José Antonio Arranz que desde aquí le envío un abrazo.
Pero esta carrera se la dedico a mi mujer Rebeca Lopez Gil y la persona que nos ha hecho tan feliz este año, nuestro hijo Marc… Gracias, gracias y gracias.
Un saludo y hasta la próxima batalla, seguid disfrutando con lo que hacéis.
Enjoy!!
Nos vemos en Ironman World Championship!!